Factores de riesgo en el cáncer de mama
Los factores de riesgo son condiciones que aumentan la probabilidad de desarrollar una enfermedad, en este caso, el cáncer de mama. Se clasifican en dos grupos:
- No modificables: Son aquellos sobre los que no tenemos control, como la edad, el sexo, los antecedentes familiares, los factores genéticos y la densidad del tejido mamario.
- Modificables: Son aquellos que podemos controlar. Se estima que uno de cada tres casos de cáncer está relacionado con estos factores, entre los que se incluyen el consumo de alcohol y tabaco, la presencia de ciertas infecciones, una alimentación poco saludable y el sedentarismo.
La Influencia de la dieta en el riesgo de cáncer de mama
Diversos estudios han analizado la relación entre la alimentación y el riesgo de desarrollar cáncer de mama. A continuación, se destacan dos investigaciones clave que han aportado evidencia sobre el impacto de la nutrición en esta patología.
- Estudio EPIC (European Prospective Investigation into Cancer and Nutrition)
El Estudio EPIC, iniciado en 1993, es una de las investigaciones más amplias sobre la relación entre la dieta y el desarrollo de diversos tipos de cáncer, incluido el de mama. Sus hallazgos más relevantes incluyen:
- Las personas con bajo consumo de frutas y verduras pueden tener un riesgo incrementado de desarrollar cáncer de mama. Por contrapartida, el consumo elevado de verduras (especialmente de hoja verde) puede reducir el riesgo.
- No se encontró relación entre el consumo total de carne, pescado o calcio con el cáncer de mama, pero un bajo consumo de pescado graso podría aumentar el riesgo de desarrollar la enfermedad.
- Seguir una dieta mediterránea basada en verduras, legumbres, carne blanca y grasas vegetales podría reducir ligeramente el riesgo .
- Se encontró que el consumo frecuente de alcohol (dependiendo de la cantidad ingerida) puede aumentar bastante el riesgo de contraer la patología, así como las grasas trans y una dieta con alta carga glucémica.
- Estudio Salud-EpiGEICAM
El Estudio Salud-EpiGEICAM, incluyó a 420 supervivientes de cáncer de mama de entre 30 y 80 años. A lo largo de 10 años, los investigadores analizaron el seguimiento de las recomendaciones nutricionales por parte de las participantes. Los resultados mostraron que solo el 10% de las supervivientes siguieron adecuadamente las recomendaciones en cuanto al consumo de carne roja, fibra y alimentos procesados.
Peso Corporal y Cáncer de Mama
Específicamente en cuanto al sobrepeso; varias investigaciones han demostrado que mantener un peso corporal saludable está relacionado con una reducción del 30% en el riesgo de recaída en la enfermedad.
Además, un mayor peso corporal se asocia con un peor pronóstico, mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiometabólicas y una menor calidad de vida. Por tanto, adoptar una dieta saludable no solo es fundamental para la prevención del cáncer, sino también para el manejo de la enfermedad y la supervivencia a largo plazo.
Las pacientes y las dietas
Señalar el rol de la desinformación, debido a la falta de filtración en redes sociales sobre dietas y el impacto de estas en el desarrollo de cáncer de mama. Dos oncólogas revisaron 50 artículos sobre el tema y descubrieron que el 77% contenía información perjudicial y el 32,5% era completamente errónea. Este fenómeno pone en evidencia la necesidad de una orientación clara y precisa por parte de los profesionales de la salud para evitar mitos y enfoques no respaldados por la evidencia científica.
Un aspecto relevante en la atención al cáncer es el interés de los pacientes por la nutrición. Según un estudio de 2021, el 57% de las pacientes de cáncer de mama tenían dudas sobre la alimentación, y muchas de ellas recurrían a fuentes como las redes sociales (68,5%) y grupos de apoyo (58,7%) para obtener información. Sin embargo, solo el 51% de las pacientes discutieron sobre nutrición con su médico o enfermera, mientras que un 32% consultó a un dietista o nutricionista.
En conclusión…
La nutrición juega un papel crucial en el desarrollo, tratamiento y recuperación del cáncer de mama. La evidencia científica demuestra que una dieta saludable, basada en los alimentos característicos de la dieta mediterránea, puede reducir significativamente el riesgo de desarrollar enfermedades como el cáncer de mama.
Además, evitar el sobrepeso y aplicar las recomendaciones nutricionales dadas por profesionales de la salud, es esencial para mejorar la calidad de vida y aumentar las posibilidades de supervivencia ante un diagnóstico de cáncer de mama.
Sin embargo, es fundamental que los pacientes reciban esta información a través de fuentes fiables y basadas en evidencia científica.
Ponencia Día Mundial del Cáncer de Mama, el pasado 21 de Octubre Hospital Clínic de Barcelona.
